lunes, 1 de noviembre de 2010

Donde pesa la vida levemente en una briza,
se limpian las carnes de sublimaciones, en mi pueblo,
en mi herido y soñado pueblo, se arrepiente la muerte
ante tanta poesía.

En mi pueblo, ese niño eterno, esa luna en la tierra,
ese espejo hasta en los huesos, el dolor es un nido,
el dolor es un pájaro con plumas en las hojas
mirando al alba poblarse del sentimiento,
único y puro, del ser argentino, del ser latino americano.

Luego allí, donde se estrujen los desiertos, luego allí en el llanto,
en la sangre, en la historia como un rayo que electrifica al tiempo,
luego allí, en el vino, en la magia,en el tango,en la pelota, 
en el  renacimiento
de la "esperanza que espera los trámites del trance".
En vos pueblo, en tu tierra raspo las rodillas
de mi vejez futura, siempre en la PLAZA, 
con mis hermanos, con mis compañeros.
!!!Hasta la memoria siempre!!!!!!