sábado, 18 de septiembre de 2010

No entiendo a los árboles porque empiezan
a desnudarse en otoño y finalizan en invierno
cuando en realidad, sus hojas, que para mi son
su plumaje, deberían cubrirlos del frío...
En cambio, si entiendo a los pajaritos que en invierno
piantan hacia ciudades cálidas, y entiendo a los
humanos que en invierno se deprimen y se encierran
en sus casas a mirar  televisión, a mirar la pared.
Pero los árboles, los árboles me preocupan,son gigantes
y hermosos, pero no puedo comprenderlos, no creo, bajo
 ningún punto de vista que les guste el invierno. Pués,
en invierno se ven tristes, descoloridos sin sus hojas, flacos
por la mala alimentación, la cual sufren por la falta de calor.
Por eso llegué a la conclusión esta noche que los arbolitos
son como un niño eterno, al que todos los inviernos
se les revela la muerte, y se desnudan, para recibirla.
Llegué a la conclusión también, que la ausencia de los pajaritos,
ya es un poco, como la muerte .Y me pregunto si yo no seré
un árbol, ya que estoy tan triste, desde que no estás............